Acústico procede del
griego ἀκουστικός (de ἀκούειν- 'oír'), la RAE lo define como “perteneciente o
relativo al órgano del oído; perteneciente o relativo al sonido; perteneciente
o relativo a la acústica; favorable para la producción o propagación del
sonido; dicho de un elemento que aísla de los ruidos o los amortigua. Pantalla
acústica. Techo acústico; dicho de un instrumento musical de sonido no modificado
con medios electrónicos; parte de la física que trata de la producción,
control, transmisión, recepción y audición de los sonidos, ultrasonidos e
infrasonidos; y por último, característica de un recinto referida a la calidad
de la recepción de los sonidos”.
El
origen griego del término acústico reside en el verbo escuchar, ἀκούω, con un
sufijo de derivación que ya era utilizado en griego -στικός, -ή, -όν. Utilizando
este término, Aristóteles (s.IV a.C.) definió la audición (Arist.de An.426a7)
como “ἡ δὲ τοῦ ἀκουστικοῦ (ἐνέργεια) ἀκοή” [el (acto) de oír es la audición].
Se puede observar en esta cita como los procesos de derivación sobre una raíz
pueden alterar ligeramente una palabra manteniendo su relación semántica.
En
este sentido se encuentra en la obra de Plutarco (s. I-II d.C.), donde además
puede observarse la importancia de reflexionar sobre aquello que se escucha. De
este modo en Plut. De Recta 1.2.92: “οἶμαί σε προακοῦσαι περὶ τῆς ἀκουστικῆς αἰσθήσεως,
ἣν ὁ Θεόφραστος παθητικωτάτην εἶναί φησι πασῶν” (Pienso que te gustará oír
antes algo sobre el sentido de lo escuchado, que, como dijo Teofrasto, está más
expuesto a las pasiones que cualquier otro).
En el terreno filosófico se
aplicaba a la disposición que alguien tenía para escuchar, como la cualidad de
los pitagóricos σιωπηλοὶ καὶ ἀκουστικοί (Iambl.VP 163), los que escuchan y
callan. De este modo, Epicteto (s.
I-II d.C) en sus discursos
presenta esta cualidad como positiva, en Epict.3.1.13: “οὕτως
μου ἀπέγνω; νέος οὐκ ἤμην; οὐκ ἤμην λόγου ἀκουστικός; πόσοι δ᾽ ἄλλοι νέοι ἐφ᾽ ἡλικίας
πολλὰ τοιαῦτα διαμαρτάνουσιν;” (¿Has perdido la confianza en mí de esta manera?
¿No era yo un joven? ¿No estaba bien dispuesto para oír las palabras? ¿Cuantos
de mi edad se equivocan en muchas de estas cosas?).
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