Faisán

la RAE lo define como “ave del orden de las galliformes, del tamaño de un gallo, con un penacho de plumas en la cabeza, cola muy larga y tendida, plumaje de vivos colores en el macho, y muy apreciada por su carne; urogallo; hongo comestible de color pardo que se cría en los jarales”.

El origen de este término va unido a la introducción en Europa del ave: Grecia. Procede del griego Φασιανός, literalmente 'del Fasis', río de la Cólquide, lugar de procedencia de estas aves. De la existencia de los faisanes en la antigua Grecia proporciona pruebas Aristófanes (s. V-IV a.C.) en Las Nubes, en Aristoph. Cl. 109: “οὐκ ἂν μὰ τὸν Διόνυσον, εἰ δοίης γέ μοι; τοὺς φασιανοὺς οὓς τρέφει Λεωγόρας” (ni hablar, ¡por Dioniso!, ni aunque me dieras los faisanes que cría Leógoras).